¿Quién pudiera asemejarse a ti? ¿Quién pudiera comprender la inmensidad de tu amor? Pero no hay nadie capaz de alcanzar la dimensión de tu infinita compasión.
Aquellos que se han acercado a ti, por obra de tu bendición han sido purificados con el fuego de tu amor. Quiero yo también ser parte de esta comunión, para corregir yo mis límites, mis fronteras, yo no tengo alas que puedan alcanzar la inmensidad de tu cielo. Pero me inclino ante el altar solemne, digno de tu cruz ,en él sacrificaste tu bondad , tu ternura, tu amor, tu inmensidad por todos, por mi .
¿Quien puede ser digno de tu sangre inmaculada? Nadie es capaz, nadie jamás. Pero tu amor lo ha llenado todo, lo ha dado todo. Déjame entonces, vivir a tus pies por amor a tu sangre, a tu corazón de infinita misericordia , piedad y salvación.
Déjame Señor, beber el agua viva de tu presencia. ¿Quien será digno de ti? Ni el sol brilla mas que tu. Ni el infinito es mas grande que tu.
¿Como ser digno de tu presencia? ¡Como mirar y no ser cautivado por tu bondad!
Señor, dame la oportunidad de recibir tu luz, yo que vivo en la oscuridad.
Señor, déjame recibir tu amor. Señor, dame tu compasión. Una gota de ti, será un océano para mí. Un instante de ti, será para mí, la eternidad. Tu palabra, todas las palabras. Tú presencia, todas las presencias. Tu ciencia, todas las ciencias. Tu conocimiento, todos los conocimientos.
Señor, ¿Qué soy yo sin ti? Señor, dame tu cruz, dame tu amor. Libérame de la ignorancia, del pasado, la ilusión. Déjame Señor, conocerte. Déjame entenderte.
Déjame acercarme a tu eterna, infinita compasión.
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